¿Qué es SD-WAN?

La SD-WAN, o Software-Defined Wide-Area Networking es una técnica para utilizar software para hacer que las redes de área amplia sean más inteligentes y flexibles. Generalmente, se comienza por conectar sitios directamente a Internet a través de enlaces de banda ancha de consumo masivo en lugar de enviar todo el tráfico de regreso a una oficina regional a través de líneas privadas (que a menudo se basan en una tecnología antigua y costosa, conocida como MPLS). Las configuraciones y las políticas de acceso se manejan en forma centralizada y se aplican fácilmente en todos los sitios, y así se elimina la necesidad de administrar cada dispositivo WAN individual en forma manual.

Muchas empresas o agencias gubernamentales buscan SD-WAN para reducir o eliminar su dependencia de las líneas MPLS costosas y lentas. Sin embargo, eso es solo el inicio de lo que pueden hacer las SD-WAN por las organizaciones:

Menores costos de conectividad – La SD-WAN puede reducir los gastos operativos continuos al cambiar de líneas MPLS costosas a una banda ancha de consumo masivo, como fibra, cable, DSL o incluso tecnologías móviles.

Mayor rendimiento para las aplicaciones en la nube– Con la SD-WAN, se pueden agregar nuevas líneas de manera rápida y sencilla en los sitios que necesitan más capacidad. Y, al conectar los sitios directamente a Internet, la SD-WAN reduce los cuellos de botella y las demoras que son comunes en las WAN antiguas.

Resistencia de enlaces múltiples – Los entornos de WAN tradicionales generalmente tienen un único enlace de red que se dirige a cada ubicación. Con la SD-WAN, se pueden utilizar varios enlaces de distintos ISP, lo que elimina un único punto de falla que podría hacer que se caiga la red.

Mayor agilidad – Cuando abre nuevas sucursales, el tiempo es dinero. La SD-WAN le permite configurar redes confiables y seguras rápidamente, al utilizar los ISP que sean más adecuados para cada ubicación.

Uso optimizado de los recursos – La SD-WAN le permite asignar de manera inteligente aplicaciones clave a distintos enlaces, incluidas las líneas internas así como conexiones a Internet, y asignar distintas garantías de Calidad de servicio (QoS) a cada una. Esto le permite aplicar los recursos correctos en cada situación para maximizar el rendimiento y la productividad, a la vez que minimiza el costo.